A veces cerca, otras a lunas de distancia.

Y ese maldito karma que siempre vuelve y no parce querer olvidarme. Y no se entera que de buena me paso de tonta, y me sigue a mi culpando de todo. Que a veces hace que los Lunes sean muy perros y a los Viernes parece mandarlos a millones de años luz.
Pero puede que últimamente este aprendiendo, días largos que acaban siendo de esos que no olvidas, tardes en las que no paras de llorar, pero de la risa esta claro, y te duele el corazón, pero solamente de querer tan fuerte.

Solo una cosa más para ti querido Karma, me prefieres de buenas que de malas, así que no me jodas mucho, porque tranquilo que si quiero se hacerlo mil veces mejor que tu, porque puedo ser la pesadilla que te muerde la boca.

                 Atentamente esta loca, que te espera con la mejor de sus sonrisa cuando vengas a cagarla.

Orr.